Un pequeño sorbo, uno rápido. Lo tomas y lo miras a los ojos
asintiendo ¨No somos nadie¨. No podemos
ni siquiera ofrecer nuestra presencia porque es lo más limitado y pesado que
tenemos. Y sin embargo permanecemos en un abrazo, con el oído sobre un pecho. Y
no es que ya no estemos aquí y estemos en otro sitio, o que ya no pertenezcamos
a ninguno, es que siempre hemos sido pequeños en uno mismo y ahora vemos ese
mismo. Entonces nos apetece pasar la noche en pie y leer todo lo que no hemos leído
y ver todo lo que no hemos visto, y viajar en avioneta, y salvar al mundo para
sentirnos también salvados… Pero lo cierto es que no podemos ir a buscar
consuelo en ningún sitio, porque el consuelo no existe, ni siquiera en unos
acordes. No lo necesitamos, porque el consuelo no existe, ni entre unos
renglones. No pesan lo suficientemente los milenios en nuestras cervicales como
para encontrarlo. Y posiblemente los cuerpos no valgan nada y los desechen los
años, aunque uno acabe de interrumpirte para apurar un último abrazo.
Por eso no hay música, sólo un tímido brote de pensamiento que
aunque ya no sólo permanezca en mi mente, se oculta, y que pese a todos los
esfuerzos, no se dejaría ver ni en cien volúmenes completos, ni dándole vueltas
durante cuarenta años.
Y he mentido, siempre hay música.
me gusta mucho. Pero he olvidado dónde está el botón de "seguir", ¿se puede seguir a alguien solo leyéndole? Y en realidad, no sé, quizás no importe demasiado...
ResponderEliminarGracias Titania. Pues antes si no me falla la memoria solía existir en blogspot un botón de ¨Seguir este blog¨ que ya no existe o no encuentro. Creo que la única forma es irte a tu perfil de Blogger y dónde salen todos los blogs que sigues añadir otro. Demasiado esfuerzo para tan poco blog :)
EliminarLo haré esta misma tarde, las vacas que rumian son mi perdición :P
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